Hernán Casciari acerca de los veranos con Juegos Olímpicos:
Están los años pares divertidos (1978, 1986, por ejemplo) en los que hay Mundial de Fútbol y cualquier país decente puede salir campeón, campeón en serio, en un deporte que tiene las reglas claras; y después están los años pares aburridos (1972, 2004, o éste mismo de ahora) en los que siempre ganan los chinos, los rusos y los yanquis a unos jueguitos que entienden solamente ellos
Cargado de ironía pero al final, creo que tiene bastante bastante razón. Cada cuatro años, y sólo cada cuatro años, parece que todos nos convertimos en seguidores de la gimnasia rítmica, los saltos de trampolín, la esgrima, la halterofilia, el judo, ….. Y por supuesto, la familia real al completo. Resulta que son grandes seguidores de estos deportes (aunque casualmente siempre van a ver a aquél deportista con posibilidades de ganar medalla).